De nada puede valer un perfil del autor si no deja ver su intención. Si ésta no es buena ni clara, el perfil poco va a decir de él, y lo que diga nada aclarará.
Si crees que es una foto muy vista no la mires, apártala de tus ojos. Es verdad, los pinos cansan, siempre con ese verde azulado. Las hayas que todavía aguantan el tipo, van haciendo amarillos y su verde ya flojea. En el centro los que fallan deben ser los arces o los avellanos, que enseguida se entregan a los ocres. Tampoco los arbustos son de fiar, ni el boj que da notas hasta naranjas, ni el majuelo del que sólo resaltan los frutos rojos, ni todos esos brezos que en agosto se han tostado. Ni siquiera los helechos aguantan en sus verdes. Y encima la hierba de los calveros todavía está amarilla y rala, sin acabar de venirse arriba y empastar el cuadro. Con lo que gustan al urbanita esos prados monótonos con césped de fantasía.
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