viernes, 25 de marzo de 2011

La verdad del cínico


Diogenes Sinopius, comisario informativo
de la cadena XYZ, relajándose en la sauna
Siempre a la sombra de los hechos, apoyado en su perpetua hipótesis, sospecha, acusa e informa al servicio de sus amables lectores. La verdad aún no le pertenece, y lo dice, como dice también que es patrimonio indisoluble de todos. Si de seguir su pista y de alcanzarla se trata, ningún medio es para él más fiable que el plebiscito publicitario, allá donde el público se pronuncia con su propio sueldo y deja huella de su cotidiana verdad. Esa, y no otra, es la realidad verdadera, la que componemos todos, fruto de nuestros constantes y libres intercambios, de nuestras pérdidas y ganancias, de nuestra evolución consecuente en la diaria lucha con la naturaleza intransigente y despiadada. Cualquier otra vía hacia la verdad sería especulativa, incluso científica quizá, pero en ningún caso más democrática que la abrumadora verdad de la clientela al completo.


No hay comentarios: